¿Quieres comprar un chalet? Es posible que estés consultando en varias webs para encontrar el chalet de tus sueños y no te quede muy clara la diferencia entre un chalet adosado y uno pareado. En este post resolvemos todas tus dudas.
Vivir en un chalet es una forma de ganar en independencia y en amplitud respecto a vivir en un piso, por eso es una opción bastante buscada por los compradores. En las grandes ciudades, debido a la falta de espacio, es complicado encontrar chalets independientes y, por lo tanto, es más sencillo encontrar un chalet adosado o pareado.
¿Qué caracteriza a un chalet adosado?
Un chalet adosado es un chalet cuyas paredes laterales están unidas a otros chalets, por lo que, salvo que se trate de los chalets de esquina, tienen un chalet a cada lado. Esto supone que las ventanas de la vivienda estarán en la parte delantera y en la trasera.
Un chalet adosado puede aportar más espacio, pero no podemos olvidar que suele estar distribuido en varias plantas, de manera que se pueden crear diversas zonas, pero las escaleras puede ser un obstáculo para aquellas personas con problemas de movilidad.
Es habitual que en las urbanizaciones de chalets adosados haya elementos comunes como:
- Los garajes.
- Las zonas ajardinadas.
- Las piscinas.
- El gimnasio.
Las urbanizaciones de chalets adosados suelen situarse un poco más alejadas de los centros urbanos o en zonas de playa.
¿Qué es un chalet pareado?
En este caso los chalets están construidos de dos en dos, de forma que solo comparten una pared y pueden tener ventanas en la parte delantera, en la trasera y en un lateral. Como consecuencia de ello, podrán tener más ventanas y más luz.
En el caso del chalet pareado se reducen los problemas que pueda haber con otros vecinos, ya que solo habrá uno y también se disfrutará de una mayor privacidad. Sin embargo, no suelen tener zonas comunes como jardines y piscinas.
¿Qué ventajas y desventajas tiene vivir en un chalet adosado o pareado?
Vivir en un chalet adosado o pareado puede aportar ventajas como las siguientes:
- Mayor intimidad tanto fuera como dentro del chalet.
- Más posibilidades a la hora de distribuir el espacio de la casa en varias plantas y crear diversos ambientes.
- Más superficie y amplitud que puede favorecer la convivencia, sobre todo en el caso de familias numerosas.
Entre las desventajas podemos destacar las siguientes:
- Supone gastos más elevados de mantenimiento o de suministros como el agua, la luz o el gas, debido a que la superficie es mayor.
- Al tratarse de viviendas más independientes y de urbanizaciones con menos vecinos se socializa menos, y esto puede afectar más a los niños.
- En ocasiones son viviendas más inseguras ya que el acceso es más sencillo para los ladrones, pero se pueden instalar alarmas y cámaras.
- Suelen situarse en las afueras de las ciudades por lo que si te tienes que desplazar al centro a trabajar vas a tener que invertir tiempo en transporte público o coche propio.
En el supuesto de que quieras comprar un chalet adosado y tengas dudas sobre cómo financiar la compra con una hipoteca, contacta con nosotros. En Credexia estaremos encantados de orientarte. Nuestro equipo profesional está respaldado por una experiencia y un conocimiento impecables. Seguro que podemos ayudarte.
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