Seguramente habrás visto o oído hablar de un TPV. Sin embargo, puede que no sepas con exactitud a qué se corresponden estas siglas y para qué sirve este dispositivo.
TPV corresponde a las siglas Terminal Punto de Venta. Se trata de un aparato electrónico que permite a los establecimientos realizar sus cobros y gestionar sus ventas. Lo cierto es que tiene más funciones de las que puedas imaginar.
Probablemente habrás visto algún TPV cuando has acudido a algún comercio y has decidido pagar con tarjeta. Sin embargo, lamentamos comunicarte que ese aparato no es el TPV, sino el datáfono.
El concepto de TPV va más allá y, aunque está relacionado, no se trata de un dispositivo físico.
Gracias a su tecnología, este sistema, además de permitir cobrar con tarjeta, sirve para otras muchas más tareas. Podríamos decir que actúa como el gestor de las ventas de un negocio, ya sea físico u online.
A continuación, te explicamos en Credexia qué es y para qué sirve un TPV.
¿Qué es un TPV?
Tal y como indicábamos en la introducción de este artículo, el significado de TPV es Terminal Punto de Venta. Se trata de un sistema que permite gestionar las ventas de un establecimiento de forma integral.
Al hablar de “integral” nos referimos a unificadamente: todo desde un mismo sitio (o sistema, en este caso). Es decir, gracias al TPV es posible cobrar, pero también es posible imprimir la factura simplificada o ticket (por ejemplo). Todas las funciones inherentes y necesarias para la gestión se pueden realizar con este dispositivo.
El TPV, al igual que cualquier equipo informático, puede componerse de un hardware y un software (¿cómo si no podríamos imprimir los tickets si no es a través de un hardware?). Sin embargo, se suele confundir el término TPV con el datáfono.
Un TPV, en sí mismo, es la tecnología que hace posible gestionar el proceso de venta de forma íntegra.
No se trata de un aparato en particular.
El datáfono es el aparato que permite el pago con tarjetas, a través de una línea inalámbrica o telefónica. Es el lector de tarjetas que normalmente ves en los comercios físicos.
Pero ¿cómo pagas con tarjeta a través de un comercio online? En este caso también se trata de un TPV, pero sin datáfono.
En resumen, un TPV puede o no puede tener cualquier tipo de hardware asociado. En las tiendas virtuales existe uno que no cuenta con hardware asociado: se trata de un TPV virtual, que puede gestionar los cobros a través de la red sin ningún tipo de hardware.
No obstante, para realizar ciertas funciones (como por ejemplo imprimir tickets), es necesario que el TPV cuente con algún tipo de hardware (un lector de códigos de barras, un lector de tarjetas, una caja registradora, una pantalla, impresora etc.). Suele ser necesario complementar el programa de gestión con algún aparato que nos permita operar.
Un TPV es la tecnología que permite gestionar las ventas de forma unificada. Suele tener consigo algún tipo de hardware para realizar ciertas funciones. Excepto los TPV virtuales.
¿Para qué sirve un TPV?
Las funciones de un Terminal Punto de Venta se adaptan al tamaño y las necesidades del negocio. Cada empresa puede contratar una alternativa acorde a sus necesidades.
Podríamos resumir las diferentes funciones de un TPV del siguiente modo:
- Para que los pagos con tarjeta puedan ser procesados, es necesario contar con un TPV y un datáfono físico situado en el local. En las tiendas online bastará con uno virtual, los cuales cuentan con una pasarela de pago online.
- El cliente es titular de una tarjeta de crédito o débito, emitida por una entidad y que garantiza que tiene dinero en su cuenta de banco o tiene concedida una línea de crédito.
- El datáfono está conectado a la red inalámbrica (puede ser telefónica, pero actualmente suele ser Internet). Los autónomos que se desplazan pueden, incluso, llevar un terminal móvil para cobrar desde cualquier lugar (incluye una tarjeta SIM con su propia conexión a Internet).
- El propio datáfono registra los datos, imprime el ticket y puede hacer el control de caja. Cuando se tienen incorporadas todas las funciones de contabilidad y venta en el sistema se le suele llamar “terminal integrado” (puede incluir la generación de informes y la gestión de pagos a proveedores).
- Además de un datáfono, puede integrarse en la propia caja registradora para gestionar los cobros en efectivo.
- Es posible incluir la propina en el pago con tarjeta (ideal para los negocios hosteleros).
- Algunos incluyen el servicio DCC, aquel que permite pagar a los clientes extranjeros en su propia moneda (Dynamic Currency Conversion en sus siglas en inglés).
¿Por qué es importante contar con un TPV en tu negocio?
El 72% de los usuarios utilizan la tarjeta de crédito o débito en sus compras del día a día. Es necesario contar con un sistema que les permita (o les facilite) utilizar este medio de pago. El comercio que no disponga de un mecanismo que posibilite al cliente utilizar su tarjeta, probablemente perderá facturación.
Por ello, en los comercios físicos se hace cada vez más necesario contar con un TPV físico en las tiendas. Ni que decir tiene que en las tiendas virtuales es necesario cobrar a distancia, y esto se consigue con uno virtual.
Hemos comprobado como las funciones de un TPV son variadas. Este sistema de gestión de cobros está sustituyendo a las cajas registradoras, debido a que facilita las tareas de gestión de caja y control de inventario.
Todas las funciones relacionadas con la venta pueden ser abordadas sin las dificultades y el tiempo que suponían. El proceso es automático e integrado.
En síntesis, hoy en día se hace cada vez más necesario implementar un TPV en tu negocio por motivos de venta (mejor servicio y facilidades para los clientes), una mejor organización y un mayor control de los flujos de dinero que entran y salen del negocio.
Como habrás podido observar, sirve para muchas más cosas que el cobro con tarjeta, aunque cuando se piensa en él, automáticamente se relaciona con el datáfono.
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