Entre las múltiples opciones existentes en las modalidades de créditos, una de las más interesantes es el préstamo a fondo perdido. Una vía de financiación atractiva y una alternativa siempre considerable para impulsar negocios, para poner en práctica ciertas actividades o para otras funciones.
El préstamo a fondo perdido
También conocido como crédito a fondo perdido, es una forma de financiación que no exige la devolución del dinero. Además, tampoco se añaden cargas como comisiones o intereses.
Para obtener un préstamo de esta naturaleza se suele exigir claridad meridiana sobre el objetivo al que se destinan los fondos del crédito. Se justificará en detalle el proyecto a poner en marcha. También se suele incluir un plan de empresa para conocer las opciones de crecimiento del emprendimiento.
No hay muchas entidades que ofrezcan estos préstamos. Es común que sea cosa de los gobiernos de un país, ayuntamientos o comunidades autónomas. Los mismos sirven como fórmulas para el desarrollo de ideas emprendedoras. Por eso se suelen conceder a individuos que desean convertir sus emprendimientos en empresas capaces de generar empleo de calidad, presión impositiva e impulso social y económico.
No obstante, también se suelen conceder créditos a fondo perdido en zonas desfavorecidas o víctimas de catástrofes o crisis de diversa índole. Las administraciones inyectan dinero para favorecer la recuperación.
Tipos de préstamos
Existen dos tipos de préstamos a fondo perdido:
- Préstamos a la explotación: se dirigen a financiar el gasto corriente de una empresa. Se incluyen subvenciones, bonificaciones a los tipos de interés, concesiones directas, etc.
- Préstamos al capital: financian inversiones.
En el campo de las subvenciones, encontramos a su vez otras modalidades interesantes destinadas a impulsar negocios y proyectos con fines concretos. Eso sí, se debe demostrar, para conseguirlas, cómo se obtendrá beneficio y a qué irán destinadas:
- De concurrencia no competitiva: se conceden en orden de presentación. Acaban cuando se agotan los fondos.
- De concurrencia competitiva: se valoran las solicitudes y se conceden a aquellos proyectos con mejor valoración.
- De forma directa: previstas en los presupuestos generales del estado, se destinan a proyectos de interés social, público, humanitario o económico.
Cómo se consiguen estos créditos
Puedes observar que no es sencillo conseguir uno de estos créditos a fondo perdido. Y es que no existe una regla exacta que asegure la consecución de estos préstamos.
Si se quiere obtener una subvención pública a fondo perdido, hemos de realizar un análisis detallado de nuestro proyecto. Solo en caso de que tenga recorrido, potencial e interés público, económico o social, se podrá obtener una financiación de esta naturaleza.
Si, estudiado el negocio, consideramos que es viable lograr el crédito, se puede buscar en diversos organismos públicos, desde gobiernos locales y regionales hasta el nacional. Las diferentes concejalías, consejerías y ministerios ofrecen distintas opciones en las que concursar.
¿Crees que puedes conseguir un préstamo a fondo perdido, pero no tienes los medios suficientes para lograrlo? ¿Todavía guardas dudas respecto a este tema u otros parecidos? No pierdas tiempo y contacta con nuestro equipo profesional. Juntos podremos llegar a tu objetivo.
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