¡Qué bonito es dar el paso de vivir en pareja! Es un momento de ilusión, de alegría y, cómo no, de expectativas… Expectativas que podrían verse truncadas si no se tienen en cuenta algunos aspectos prácticos de la convivencia.
En este artículo queremos darte una versión más pragmática de irse a vivir juntos: sigue leyendo y descubre esos aspectos menos “románticos” de la vida en pareja, empezando por la economía.
Aspectos prácticos a considerar cuando vas a vivir en pareja
Cómo gestionar el dinero en pareja
Existen muchas posibilidades, financieramente hablando, de vivir en pareja:
- Tenéis la opción de crear un fondo en común, donde cada miembro de la pareja ponga una parte de sus ingresos y de ahí se sufragan los gastos comunes como alquiler, compras, facturas… Pero cada uno tiene una cuenta propia, por separado.
- Otra opción es turnarse: cada mes es uno el que paga.
- También podéis compartir cuenta bancaria, lo que se llama vivir en un régimen de bienes compartidos. El dinero de la cuenta es de ambos y de esa cuenta se pagan todos los gastos.
¿Compartimos cuenta bancaria?
Es difícil saber cúal es la mejor opción, pero sí que hay que tener en cuenta ciertas aspectos:
- Es muy positivo aclarar desde el principio cómo vais a llevar las cuentas: os va a ahorrar discusiones innecesarias en el futuro.
- Un error muy común es compartir las cuentas en cuanto empieza la convivencia. Lo ideal es ir viendo cómo van las cosas, cuál sería vuestra mejor forma de organizaros: eso lo dirá el día a día. Podéis hacer un fondo común o que uno pague las facturas y el otro le transfiera su parte. Ir a medias, pero cada uno gestionando su propio dinero.
- Cuidado con tener secretos financieros: la confianza es vital para la relación y para la convivencia.
Sea como fuere, si vais a usar una conjunta, utilizad el comparador de cuentas para encontrar la oferta que mejor encaje con vuestras necesidades financieras.
Consejos para vivir en pareja
En la convivencia en pareja lo compartes todo, lo bueno y lo malo. Y ahora no hablamos solamente de una vertiente económica… Hasta ahora os veíais en vuestros ratos libres, el fin de semana, en momentos de ocio… Pero vivir juntos implica, todavía más, comunicación, respeto, comprensión…
- Es fundamental que exista una comunicación asertiva en la pareja. Compartir ideas, deseos, miedos… con respeto y sin herir a tu pareja. No des por sentadas cosas que igual crees que están bien.
- Una de las claves de una buena convivencia es la empatía, ponerse en el lugar del otro. Es fundamental para poder ayudar a tu pareja y saber cómo se siente. En lugar de señalar un defecto, lo ideal es complementarlo y ofrecer apoyo en lo que necesite.
- En cuanto a las tareas del hogar, lo ideal es hacer una lista de todos los quehaceres y repartirlos desde el principio.
- No caigas en la rutina: está bien tener unos horarios, pero prueba a cambiarlos de vez en cuando y haz aparecer el factor sorpresa. Esto fortalecerá la pareja y la convivencia, además de vivir diferentes experiencias que enriquecerán vuestra relación.
Compartir tu vida con alguien es una experiencia única: compleja y bonita a la vez. Por ello, es importante que los dos miembros cuiden de los aspectos más importantes hasta los detalles más pequeños. Si vais a dar el paso de vivir en pareja, pensad también en los aspectos más prácticos porque, aunque no lo parezca, tenerlos medidos ayudarán a una mejor convivencia.
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