¿Te gusta la idea de alquilar una vivienda pero te gustaría que acabara siendo tuya? ¿No quieres arriesgar a comprar una casa que, con el tiempo, ves que tiene más contras que pros? Quizás un alquiler con opción a compra puede ser la alternativa ideal en tu caso. En este artículo hablamos sobre esta propuesta.
¿Comprar o alquilar?
El panorama inmobiliario actual es bastante complicado como consecuencia de las diferentes crisis económicas. Estas han hecho especialmente daño al sector y convertido el acto de hipotecarse en algo que, para algunas personas, se vive como una apuesta de doble o nada.
Si vives en una gran ciudad, además, te habrás dado cuenta de que la gentrificación acelerada por los pisos para turistas y estudiantes ha encarecido el precio de los alquileres.
Como resultado de esto, muchas personas que buscan vivienda tienen que dedicarle un buen rato a pensar cuál de estas situaciones es la que mejor pueden sortear en función de su balance económico: ¿comprar o alquilar? Sin embargo, es importante recordar que también existe un tercer método: el alquiler con opción a compra.
¿Qué es un alquiler con opción a compra?
El funcionamiento del alquiler de opción a compra se parece mucho al de un alquiler corriente: a cambio de unos pagos mensuales, el inquilino puede habitar la vivienda del propietario. La diferencia reside en que pasado un tiempo, acordado previamente, se permite al inquilino decidir si quiere comprar la vivienda.
Es una dinámica sencilla, aunque a nivel burocrático tiene su complejidad. Esto se debe a que el tipo de contrato que se firma es un contrato doble, compuesto por dos subcontratos: el de alquiler y el de compraventa. Esto hace que este trámite esté regido a la vez por la Ley de Arrendamientos Urbanos y por el Código Civil a la vez.
Ventajas del alquiler con opción a compra
Para el inquilino
Esta modalidad de alquiler es ideal para aquellas personas que desean adquirir una vivienda propia pero que, al encontrarse en una situación económica precaria, no solo tienen que enfrentarse a los elevados precios del mercado, sino que también tienen que lidiar con la reticencia que las entidades bancarias tendrán.
También podría darse en casos de personas que primero requieren una situación más informal o temporal, como el alquiler, pero no quieren cerrar la puerta a algo definitivo, es decir, la compra.
Así, el alquiler con opción a compra:
- Permite ganar un poco más de tiempo para poder ahorrar para la compra de la vivienda
- Facilita la concesión de hipotecas por parte de las entidades bancarias
- Permite igualmente acceder a las ayudas al alquiler
Para el propietario
El propietario del inmueble también puede beneficiarse del alquiler con opción a compra en algunos escenarios, como por ejemplo:
- Si el propietario quiere dar salida a la vivienda rápidamente porque necesita los beneficios económicos cuanto antes o porque quiere monetizar el tiempo de espera.
- Si el propietario, tras informarse, prevé que los precios de mercado van a bajar y quiere fijar el precio de su inmueble antes de que pase o mantener el interés del comprador en potencia permitiéndole estar de inquilino antes de que se efectúe la compraventa.
- Además de la rápida salida al mercado y de la liquidez que proporciona el tiempo de alquiler previo a la compra, existe otra ventaja que puede ser de interés al propietario y es que podrá beneficiarse de las ventajas fiscales propias de los arrendadores y posponer los impuestos de compraventa hasta que la escritura sea ejecutada.
Y hasta aquí las principales ventajas del alquiler con opción a compra. Si te ha captado la atención no dudes en contactarnos para informarte más al respecto e introducir las desventajas en el momento de valorar cuán viable es esta opción para ti.
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